El pasaporte estadounidense ha descendido de la lista de los 10 países más poderosos del mundo por primera vez en los 20 años de historia de este índice clave. 

Esta disminución del poder del pasaporte estadounidense desde su primer puesto en 2014 “indica un cambio fundamental en la movilidad global y la dinámica del poder blando”, según Christian Kaelin, presidente de Henley & Partners y creador del Índice de Pasaportes Henley, publicado esta semana.

Estados Unidos ha descendido al duodécimo puesto. 

“Las naciones que adoptan la apertura y la cooperación están logrando avances significativos, mientras que quienes se aferran a privilegios del pasado se están quedando atrás”, añadió Kaelin. 

Este descenso en Estados Unidos se produce en medio de las medidas drásticas contra la inmigración por parte de la administración del presidente Donald Trump, que llevaron al Departamento de Estado a anunciar el inicio de una revisión de la documentación de más de 55 millones de titulares de visas estadounidenses para detectar posibles infracciones.