Por Ariel Ferrero para SunnyNews, un medio de Grupo FMGN Press (*)

El gobierno de Estados Unidos lanzó la “Gold Card”, un nuevo visado orientado a viajeros e inversores de alto patrimonio que buscan establecerse en el país con una vía acelerada hacia la residencia y la ciudadanía. La tarjeta, anunciada por el presidente Donald Trump, tiene un costo inicial de USD 1 millón y apunta a atraer perfiles internacionales capaces de generar actividad económica y empleo.
Según explicó el secretario de Comercio Howard Lutnick, la Gold Card se inspira en la tradicional green card, pero con requisitos reforzados: los solicitantes deberán demostrar “habilidades extraordinarias” o capacidad de aportar “beneficios sustanciales” a la economía estadounidense. Para las empresas que apliquen en nombre de un candidato, el costo asciende a USD 2 millones, más tarifas administrativas adicionales.

Una nueva categoría para quienes buscan vivir y operar en Estados Unidos

El programa podría convertirse en una alternativa para viajeros frecuentes, empresarios globales, profesionales de industrias creativas y tecnológicas, y familias que buscan residencia prolongada en EE.UU. con una ruta más clara hacia la ciudadanía.
La iniciativa se suma a las reformas del sistema migratorio impulsadas por la Casa Blanca, que incluyen tanto restricciones en visados laborales tradicionales como la creación de instrumentos premium orientados a atraer capital extranjero.

Versión “Platinum”: beneficios fiscales y estancias más largas

El gobierno también anunció que en los próximos meses debutará la “Platinum Card”, con un valor estimado de USD 5 millones. Permitirá a los titulares permanecer hasta 270 días al año en Estados Unidos sin tributar ingresos generados fuera del país, un beneficio especialmente atractivo para nómadas de alto patrimonio y ejecutivos internacionales.
La administración confirmó que ya existe una lista de espera de interesados y aclaró que el precio podría aumentar según la demanda.

El programa se suma a la tendencia global de visados “golden” o residencias por inversión, hoy presentes en destinos turísticos como Portugal, España, Grecia, Emiratos Árabes y varias islas del Caribe.
Trump, por su parte, sostiene que la Gold Card atraerá “los mejores cerebros y el capital necesario para mantener la competitividad global del país”.

Impacto en el turismo de larga estancia y el mercado de residencias

La creación de la Gold Card y su futura versión platino podría dinamizar:

• el turismo de larga duración,
• la inversión inmobiliaria premium,
• la movilidad corporativa,
• la llegada de profesionales extranjeros que combinan viajes frecuentes con estadías extendidas.

Por Ariel Ferrero

(*) El Grupo FMGN Press es dueño de The Post y SunnyNews