Nacho Urkía, The Post, Deportes (Desde San Nicolás)

San Nicolás de los Arroyos se tiñe de fútbol y pasión. La tarde del sábado 20 de diciembre de 2025 no es una tarde más: desde las 18:00 horas, el Estadio Único de San Nicolás será escenario de un partido que promete quedar en la memoria del fútbol argentino. Allí, Estudiantes de La Plata y Club Atlético Platense se enfrentan por la final del Trofeo de Campeones, el título que cierra el calendario futbolístico nacional y pone en disputa mucho más que una copa.

Si hay algo que define este choque es el contraste. Estudiantes llega embalado. El “Pincha” conquistó el Torneo Clausura hace apenas una semana, superando a Racing en una final dramática que se definió por penales tras un empate 1-1 en Santiago del Estero. Su estilo: orden táctico, defensa férrea y personajes con temple cuando más se necesita.  

Enfrente está Platense, protagonista de una de las historias más emotivas del año. El “Calamar” se quedó con el Torneo Apertura, logrando un título histórico con épicas victorias de visitante ante grandes del fútbol argentino. Sin embargo, el segundo semestre fue turbulento: bajos rendimientos, cambios en el banco y más de un mes sin competencia oficial marcaron su camino hasta esta final.  

El ambiente en San Nicolás

Más de 25.000 almas llenan el Único, divididas entre los fervores rojo y blanco de Estudiantes y el plantense marrón con matices dorados. La ciudad vibra con el murmullo de los hinchas, los cantos que llegan desde las tribunas y la certeza de estar presenciando un capítulo que puede transformar la historia reciente de ambos clubes.  

Hay un árbitro designado —Leandro Rey Hilfer, con Pablo Dóvalo en el VAR— y una definición que, si los 90 minutos no alcanzan, irá a tiempo extra y eventualmente a penales. La televisión argentina sigue el choque por ESPN Premium y TNT Sports, evocando la magnitud del encuentro. 

Qué está en juego

Este no es un simple partido: es la última estrella del año, un trofeo que ofrece no solo gloria inmediata, sino la posibilidad de seguir abriendo puertas hacia la Supercopa Argentina, la Supercopa Internacional e incluso una Recopa. Para Estudiantes, es la chance de refrendar su crecimiento y coronar una temporada memorable; para Platense, la posibilidad de sellar uno de los mejores años de su centenaria historia.  

El partido ya late

Cuando el árbitro haga sonar el silbato, las historias quedarán de lado y solo habrá espacio para el vértigo del balón, las transiciones veloces, los duelos individuales, el choque de tácticas y la urgencia de cada club por escribir un capítulo ganador.

¿Quién levantará el Trofeo de Campeones 2025? En San Nicolás, bajo el cielo del verano argentino y el rugido de dos hinchadas entregadas, la respuesta está por llegar.